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za con un diagnóstico e involucra, luego,
la eliminación y su control, mismo que
aplicado adecuadamente a la operación y
mantenimiento de sistemas de agua pota-
ble ayuda a conservar el agua suministra-
da a las ciudades, a mejorar la calidad del
servicio, a economizar energía eléctrica
y a aumentar los ingresos por venta de
agua a los usuarios.
El segundo, de 2001,
El agua según la cien-
cia
, también del doctor Enzo Levi, per-
teneciente a la mencionada colección:
“Avances en Hidráulica”.
El libro ya tenía una primera edición pu-
blicada por Ediciones Castell Mexicana en
1989. Para reconocer el porqué del éxito
editorial de este libro a la vez histórico,
científico y literario, que relata casi 2,300
años de pensamiento científico sobre el
comportamiento físico del agua, desde
Arquímedes hasta nuestros días, basta
con citar el primer párrafo que el autor
escribió para presentar su obra:
“No existe tal vez rama de la ingeniería
que posea una historia tan rica como la
hidráulica. Precisión de disponer de agua
para satisfacer necesidades básicas cor-
porales y domésticas; utilización de vías
marítimas o fluviales para el transporte,
y cruce de ellas; irrigación de cultivos; de-
fensa contra las inundaciones; aprovecha-
miento de la energía de corrientes; todo
esto ha forzado al hombre, desde tiempos
más antiguos, a vérsela con el agua. No ha
sido un trato fácil. El habitante urbano que
la observa a diario, dócil a sus necesida-
des, bajar mansa de la llave, no tiene idea
de su idiosincrasia. No imagina con cuán-
ta paciencia y astucia hay que manejar a
esta nuestra gran amiga-enemiga; cuan a
fondo hay que entender su índole altiva
para poder someterla y doblegarla; cómo
hay que ‘dorarle la píldora’ para reducirla
a nuestra voluntad, respetando –sin em-
bargo– la suya. Por eso, el hidráulico ha
de ser, ante todo, algo así como un psicó-
logo del agua, conocedor profundo de su
naturaleza.”
Por la celebración del IV Foro del Agua
en nuestro país, en 2005 y 2006 se da
un notable incremento en la labor edito-
rial del IMTA, significando lo publicado en
esos dos años el 18% de lo editado por
el Instituto entre 1988 y 2011.
Uno de esos libros es
Leyendas del agua
en México
, en sus versiones en español e
inglés, de Andrés González Pagés.
Este libro ha provocado fuerte atracción
hacia el público debido a que presenta
leyendas prehispánicas, coloniales y mo-
dernas relacionadas con el agua. Su con-
tenido se conforma por 15 relatos, be-
llamente ilustrados: “Nahui Atl: el Cuarto
Sol, o Sol de Agua”; “Hapunda”; “Tajín y
los Siete Truenos”; “Los árboles que llo-
ran”; “El Tlalocan, o Paraíso de Tláloc”;
“El puente de los carmelitas”; “Cuando
se cambió el mundo, o cuando cayó el
diluvio”; “El manantial de la alcantarilla”;
“El origen del lago de Tequesquitengo”;
“El pez que cenó San Juan”; “La Llorona”;
“Las golondrinas de agua del Salto de San
Antón”; “Ndareje, río Lerma”; “Marina” y
“Popchón y Xulubchón”.