Manejo de la recarga de acuíferos: un enfoque hacia Latinoamérica
        
        
          324
        
        
          piroclastos, conglomerados y material volcánico. El cuerpo inferior lo constituyen rocas volcánicas
        
        
          fracturadas que sobreyacen a rocas carbonatadas de origen sedimentario.
        
        
          El modelo geohidrológico que prevalece para el acuífero está constituido por material arcillo-
        
        
          arenoso de origen lacustre, que se encuentra interestratificado con depósitos de origen volcánico,
        
        
          principalmente de tipo tobáceo, que hidráulicamente conforman en su conjunto estratos
        
        
          semiconfinantes, por lo que se les ha agrupado en dos acuitardos, separados por un evento de
        
        
          material limo-arenoso de poco espesor, compacto y probablemente de origen volcánico, al que
        
        
          se le conoce como “capa dura”. Bajo esta secuencia litológica se encuentran las formaciones que
        
        
          constituyen el acuífero en explotación y que se le denomina depósitos profundos.
        
        
          La recarga de este sistema es de tipo lateral, que se origina en las sierras que rodean al valle,
        
        
          aunque en los últimos años, como resultado de la explotación de los acuíferos, se ha generado una
        
        
          depresión piezométrica, donde los niveles son menores a los del acuitardo, formando gradientes
        
        
          piezométricos en las arcillas, los que a su vez han dado lugar a que se origine un drenaje vertical de
        
        
          este material arcilloso hacia los estratos inferiores. Así, parte de la recarga de los acuíferos proviene
        
        
          de los acuitardos.
        
        
          
            
              Acuífero Texcoco (clave 1507)
            
          
        
        
          
            .-
          
        
        
          De acuerdo con el estudio de determinación de la disponibilidad
        
        
          de agua en el acuífero Texcoco de la Conagua (Subdirección General Técnica, Gerencia de Aguas
        
        
          Subterráneas, 2002c), se establece la presencia de un acuífero libre a semiconfinado heterogéneo y
        
        
          anisótropo, conformado por:
        
        
          a) Porción superior: arcillas lacustres en el centro del valle, una secuencia de materiales
        
        
          granulares aluviales, rocas y depósitos volcánicos (tobas, brechas. andesitas y cenizas),
        
        
          con intercalaciones de sedimentos arcillosos, que en conjunto presentan permeabilidad
        
        
          media y espesor promedio de 1500 m, permitiendo la infiltración, circulación y
        
        
          almacenamiento de agua subterránea.
        
        
          b) Porción inferior: rocas volcánicas de permeabilidad secundaria por fracturamiento. Las
        
        
          fronteras, barreras al flujo subterráneo y el basamento geohidrológico está conformado
        
        
          por sedimentos arcillosos. Debajo de esta secuencia, las rocas calizas cretácicas alojan
        
        
          un acuífero confinado por sedimentos lacustres y rocas arcillosas.