 
          Manejo de la recarga de acuíferos: un enfoque hacia Latinoamérica
        
        
          642
        
        
          
            
              18.4.2.
            
          
        
        
          
            
              Calidad del agua
            
          
        
        
          El agua de inyección es potabilizada bajo muy estrictas normas las cuales fueron desarrolladas para
        
        
          prevenir el deterioro de la calidad del agua subterránea y para minimizar el taponamiento de los
        
        
          pozos y del acuífero. El agua de inyección es una mezcla en proporción de 3 a 1 de agua superficial/
        
        
          de las presas con agua residual tratada. En promedio, su salinidad ha sido de 68 mS/m o 456 mg/L
        
        
          STD (con base en un percentil de 95 %) y el carbono orgánico disuelto (COD) de 4.9 mg/L (con base
        
        
          en un percentil de 95 %) y 2.9 mg/L (en un percentil de 50 %) El agua es inyectada directamente
        
        
          al acuífero fracturado de roca dura mediante pozos profundos con profundidades por debajo del
        
        
          nivel piezométrico, donde se mezcla con el agua subterránea natural. A la fecha, la calidad del
        
        
          agua recuperada ha tenido una salinidad promedio de 91 mS/m o 610 mg/L de STD (con base en
        
        
          un percentil de 95 %) y un COD promedio de 1.1 mg/L (con base en un percentil de 95 %) y 0.4
        
        
          (en un percentil de 50 %). Desde el inicio se fijaron los siguientes principios rectores para el agua
        
        
          de inyección:
        
        
          • Que no tuviera un impacto ambiental significativamente negativo.
        
        
          • Un uso sustentable del agua del acuífero Windhoek para propósitos de agua potable,
        
        
          de preferencia sin tratamiento o cuando mucho con poco tratamiento, como
        
        
          estabilización y desinfección:
        
        
          • El agua de recarga debería cumplir con los estándares actuales de agua potable.
        
        
          • Que no represente un riesgo adicional a la salud para los residentes de Windhoek en
        
        
          comparación a las fuentes  actuales.
        
        
          • No deberían surgir problemas técnicos significativos debido a la calidad del agua de
        
        
          inyección, tales como taponamiento, corrosión y demanda de tratamiento extenso
        
        
          previo a su distribución.
        
        
          • Aceptar un deterioro de ciertos parámetros de calidad dentro del acuífero siempre y
        
        
          cuando la calidad del agua después de su extracción cumpla con normas aceptables.
        
        
          Algunos de los parámetros de calidad del agua se enumeran en la 
        
        
        
          (WAJVC,  2005;
        
        
          Tredoux,
        
        
          
            et al.
          
        
        
          , 2007). Estas directrices se basan en la premisa de que por lo menos el 75 % del agua
        
        
          inyectada se originará de fuentes de agua superficial (esto es, no más del 25 % será agua residual
        
        
          tratada).