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CAMBIO CLIMÁTICO
desarrollado capacidades para afrontar los efectos del cambio climático, tomando en consideración
la existencia de excedentes de ingresos disponibles para invertirse en mejoras a la operación e
infraestructura.
El cálculo del índice de vulnerabilidad es una herramienta que permitirá plantear aquellas variables
que pueden poner a prueba la capacidad de respuesta de la organización y posteriormente evaluar
los costos que implican plantear un conjunto de medidas enfocadas a reducir dicha vulnerabilidad.
El objetivo es que los organismos operadores incorporen los resultados del análisis de vulnerabilidad
en el proceso de planificación que, bajo el enfoque de cambio climático, implica definir impactos,
evaluar sus efectos (a través de un análisis de vulnerabilidad) así como las diferentes alternativas
disponibles para adaptarse a los impactos que se consideran significativos además del costo
económico que implica invertir en medidas de adaptación que permitan minimizar dichos impactos.
4.2 Identificación de medidas de adaptación
El índice de vulnerabilidad permite evaluar y sintetizar el nivel de susceptibilidad de un organismo
operador ante un escenario de cambio climático teniendo en consideración 1) el grado de desarrollo
que posea como organización, 2) su situación geográfica, 3) las fuentes de agua y su disponibilidad,
4) la cantidad de habitantes a servir, 5) el nivel socioeconómico, entre otros aspectos. Este conjunto
de variables puede poner a prueba la capacidad de respuesta de la infraestructura existente ante
los efectos de cambio climático, pero más aún, la capacidad de organización para prever, planear
y tomar decisiones que coadyuven en la adaptación. Bajo este contexto, se plantean un conjunto
de escenarios que permitan evaluar el efecto de implementar mejoras físicas y administrativas en
el organismo operador, a fin de incrementar su capacidad de adaptación o bien disminuir su nivel
de vulnerabilidad. El escenario de referencia o base se define en este contexto por la situación
que supone crecimiento sin cambio climático y a partir del cual se medirán la eficacia de las
respuestas de adaptación y el costo que implica mejorar el desempeño del organismo operador.
Los escenarios planteados se presentan en la figura 4.4 y se describen en los siguientes párrafos:
Escenario 1 (base)
En el escenario de referencia o base (también se denomina caso sin cambio climático) no se
considera ninguna inversión económica en las variables que intervienen en el cálculo del índice,
únicamente se satisface la demanda dado el crecimiento esperado de las variables: nivel de precios,
Producto Interno Bruto y población.
Escenario 2 (con cambio climático)
En el escenario 2, las variables de sensibilidad y capacidad de adaptación permanecen constantes
a excepción de la demanda en el que los volúmenes consumidos se calculan para las nuevas
condiciones climáticas derivadas de los escenarios de cambio climático empleados. En este trabajo
se empleó el escenario de cambio climático SRES-A2 generado por el Instituto Mexicano de
Tecnología del Agua (Martínez Austria y Patiño Gómez, 2010). El IMTA consideró dos escenarios
de cambio climático más probables (A1B y SA2) en tres horizontes de tiempo (2030, 2050 y 2100)
y para la precipitación se estimaron 23 modelos atmosféricos de circulación general en una malla